miércoles, 3 de junio de 2009

Me niego a perder nada más

Se me han caído por el camino trocitos de vosotros. Pequeñas cosas de un valor incalculable, desde la más pequeña sonrisa hasta una pulsera con rubíes, regalo de alguien muy querido.
Encontré un nuevo camino por el que avanzar, pero pasa el tiempo y veo que tengo que sacrificar ciertas partes de mí que una vez, y no hace mucho, me resultaban esenciales para estar bien.
Lo que me planteo ahora es si, siendo normal el hecho de que ciertas cosas desaparezcan, debo asumir el cambio porque no me queda otra y conformarme con los pequeños recuerdos que quedan, siguiendo adelante en el sendero o, de otro modo, luchar por conservar sumamente vivas esas cosas que tienden actualmente a caer en el olvido y así avanzar. Es complicado llevar a cabo la segunda opción estando aquí sola porque una parte de mí (hasta ahora desconocida) que cada vez pesa más, inclina la balanza gradualmente a aceptar que mi vida ha cambiado y a guardar los recuerdos que tengo únicamente como lo que son, recuerdos, sin seguir o intentar vivir de ellos. Cuando llegué aquí, tenía el corazón en mi anterior vida y el cuerpo en la nueva que ante mí se abría. No ha pasado tanto desde que llegué, pero veo que he encajado como un guante aquí y se me olvida el hecho de hacer un hueco en el tiempo para volver a casa. Sin embargo, me niego a perder nada más, me quedo con lo que hoy tengo. Guardaré todo en cajoncitos rellenos de suaves trozos de algodón para no se dañe nada lo más mínimo; con eso me quedo: con esos trocitos vuestros. Y es que, aunque lejos y en silencio, quiero que sepais que tenéis un lugar muy especial en mi corazón (que aunque no lo parezca, no es de hielo todo el tiempo), y que soy lo que hoy soy por todo lo que he vivido con vosotros, porque me he ido nutriendo de eso durante muchísimo tiempo. Ahora, aunque esa vieja etapa quede atrás y tenga una nueva por delante, quiero que os quede claro eso. Ahora me llenan otras cosas, otra gente, otros lugares... pero nunca olvidéis que os quiero. ^^



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Asi funciona esto. Cuando te vas todo desaparece, o no? no lo se... la unica persona que lo puede decidir eres tu... que quieres olvidar todo lo que tenías? bueno, es respetable e incluso comprensible, pero no olvides lo que te queda en tu tierra, xq si lo olvidas, creeme que no volverás a saber nada más de nadie. Asi funciona, triste? sí pero bueno...
Que seas muy feliz y si todavía te importa algo o alguien de tu "pasado" conservalo, aunq sea una mínima parte de tu vida, xq esa gente a la que a día de hoy todavía le importas, no se olvidan de ti... aunq en ocasiones parece que Palma se ha marchado a otro continente. Piensalo, solo es un consejo.

Un saludo

Palma dijo...

Hola Anónimo, parece que no has entendido del todo lo que quería expresar. No me olvidaré jamás de lo que he dejado atrás, ni de mi tierra, que la amo; ni de mi gente que ni me olvida ni los olvido y los quiero con todo mi corazón... pero no se puede vivir de los recuerdos porque eso no permite avanzar y mucho menos disfrutar de las cosas nuevas que van apareciendo; no se puede vivir de ellos aunque sí conservarlos en el corazón como preciados tesoros y es precisamente eso, lo que voy a hacer.
Un saludo.